Los Piratas eran uno de esos grupos que "me parecían bien". Buen pop rock con letras interesantes. Esa es la impresión que siempre me habían dado. La cosa cambió con la revisión de su tema "Promesas que no valen nada" titulada "Promesas 98", incluida en su álbum recopilatorio "Fin (de la primera parte)". Un giro suficiente como para subir el nivel y convertirse en una canción con ese toque de genialidad que se queda en la memoria. Lo único que puedo añorar un poco es el guiño a "Insurrección", tema de El Último de la Fila, al final del tema original. Pero eso seguramente sea una cuestión de melomanía y no de musicalidad.
La revisión aporta un sonido más oscuro lleno de filtros y efectos que se unen perfectamente a la letra. La música deja de ser el acompañamiento de una canción pop rock para convertirse en protagonista perfecta y subir al nivel de la melodía de voz. El conjunto, el resultado final, es practicamente perfecto. Tan perfecto que sirvió para apuntar un poquitito a los sonidos del que es considerado su mejor disco, posterior a "Fin (de la primera parte)", "Ultrasónica".
Gracias a "Promesas 98" dejé la primera parte atrás y me fui a la segunda parte. No hace falta decir que mereció la pena.
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